La felicidad en compañía, mal entendida, nos lleva a la soledad

La felicidad en la vida, cuando se comprende de forma incorrecta posibilita que las personas se sientan solas, apenadas y tristes.

Existen personas que en apariencia requieren de la compañía de los demás para que puedan disfrutar de la felicidad en sus vidas. Esto puede ocurrir por ejemplo, con todo tipo de individuos que entienden el significado de felicidad como un sinónimo de estar acompañados de terceros para evitar ese miedo interior que buena parte de las gentes, asocian a la soledad.

Solamente hay 2 cosas ciertas en toda esta percepción de la realidad:
  • En primer lugar, decirte que se trata de una interpretación de la realidad que es equivocada. Lo es porque la felicidad es perfectamente compatible con ese sentimiento de soledad del que te hablo. Tanto es así, que se pueden dar a la misma vez y no tiene porque necesariamente equipararse a algo negativo, dañino o malo.
  • No hay mayor soledad que la de aquel que condiciona su felicidad a la posibilidad de estar o no, en cualquier tipo de reunión con amigos, familiares o sencillamente compañeros de trabajo.

Una vez expuesta esta pequeña introducción para que puedas comprender que encontrarse en posesión de la felicidad y la soledad (en un mismo tiempo y espacio) es posible, pasaré a responder algunas cuestiones que considero fundamentales en referencia a esta materia.

1.1 ¿Se puede tener felicidad en soledad?

En esta segunda parte del artículo de hoy daré respuesta a algunas preguntas. La primera de estas preguntas es ¿Se puede  tener felicidad en soledad? Sin embargo, no daré una respuesta de sí o no, simplemente expondré una serie de razonamientos y en función de aquellos cada uno podrá opinar lo que quisiera.

Antes de comenzar me gustaría decirte que en mi caso, desde muy pequeño me he visto como una persona diferente, que no encajaba en una serie de roles, como perteneciente a otra época. Con el tiempo, comprendí que por ejemplo tener una pareja o disfrutar de la compañía de otra persona no tiene porque ser necesariamente alcanzar la felicidad. De hecho, conozco muchas personas que están con sus respectivas relaciones de pareja y además, sienten ese vacío que deja la soledad.

Teniendo en cuenta la posibilidad que te comentaba anteriormente, paso a comentarte los diversos motivos que repercuten en la cuestión formulada ¿Se puede tener felicidad en soledad? Bien, en primer lugar quiero decirte que la soledad tiene que ver con la ausencia total de alguna otra persona en nuestra vida, pero también de pensamiento. Guarda mucha relación con el sentimiento de miedo que padecen muchas personas con respecto a este motivo. Es decir, hay mucha gente que tiene miedo a la soledad. ¿Pero qué es ese miedo a la soledad? Responde a una circunstancia mental (porque el miedo está en nuestra mente) como una respuesta que nuestro cerebro tiene a planteamientos que igual no somos del todo conscientes, por encontrarse en nuestro subconsciente. Para que me entiendas, se puede tener felicidad en soledad siempre y cuando se evite caer en situaciones tales como las siguientes:
  • Sentimiento de melancolía como consecuencia del paso del tiempo y de los años. Conforme vamos cumpliendo años, estamos perdiendo también esa “chispa” que tuvimos cuando éramos más jóvenes. Se trata de una respuesta normal que nos afecta a todos por las distintas responsabilidades y ritmo de vida que tenemos: trabajo, hijos, proyectos, obligaciones, deberes y tareas pendientes.
  • Evitar caer en la tristeza como consecuencia de la ruptura amorosa. En mi propio caso y te hablaré desde la máxima experiencia lo sufrí en mi vida hace unos años. Cuando una relación aparentemente estable que tenía, todo iba bien y de repente terminó, caí en ese estado de tristeza conociendo la felicidad (porque no dejé de quererme) pero a la vez también estuve en esa situación que podríamos definir como soledad.

1.2 Explicación acerca de cómo es posible tener felicidad y soledad a la vez
Muchas personas piensan que la ausencia de felicidad es la tristeza. Lo mismo que para combatir la soledad lo mejor es por ejemplo, estar siempre acompañado como ocurriere en el caso de las relaciones de pareja. Como te decía anteriormente no tiene nada que ver lo uno con lo otro ya que es perfectamente compatible conocer la felicidad y la soledad al mismo tiempo. Como ejemplo te voy a poner todas esas amas de casa que están en el hogar (ámbito doméstico) al cuidado de los niños mientras el marido se encuentra en el trabajo o con los amigos viendo cualquier partido de fútbol. 
  • ¿Te has planteado cuantas por ejemplo, amas de casa podrían encontrarse en esta tesitura?

De igual modo, existen otro montón de personas que para combatir ese miedo interior que tienen a la soledad, se aventuran en todo tipo de relaciones de pareja. Con la única finalidad de no sentirse solos, quererse más y valorarse. El miedo a la soledad es terrible, pero en mi opinión se trata de una perspectiva equivocada de conseguir la felicidad de nuestras vidas.

1.3 Cómo combatir la soledad desde la felicidad interior

Es una de las preguntas de la humanidad, cuestión para la que la psicología tiene una respuesta. Lo primero que me gustaría decirte es que todo ese concepto que presentas de tu persona (autoconcepto), cómo te consideres a ti mismo (autoestima) o los diferentes mensajes que percibas de tu entorno (observación), no tienen porque ser tal y como piensas. Ya que nuestros sentidos, nos engañan y nuestra mente también lo hace. Para que puedas combatir la soledad desde la felicidad interior, te daré un sencillo consejo:
  • Disfruta de la soledad y aprovecha las bellas oportunidades que ella te facilita. Resulta increíblemente importante dedicar tiempo a todas aquellas actividades que nos gustan. Algunas de estas actividades pueden ser practicar algún tipo de deporte, pasear o conocer otros lugares.

Por otro lado,respondiendo al cómo es posible que a través de una mala comprensión de la felicidad, se llegue a la soledad te comento una serie de consejos (a modo de pequeñas frases) para disfrutar de la felicidad, evitando caer en este problema que afecta a tantas personas en el mundo:
  • La soledad no tiene porque suponer un peso para tu vida, se puede ser perfectamente feliz en soledad sin la compañía de por ejemplo, una pareja.
  • Para afrontar el miedo a la soledad, no hay mejor manera de hacerlo que dotando a nuestras vidas de una nueva perspectiva de la realidad. El cambio siempre será una oportunidad novedosa de volver a sonreír en compañía de ese amiga que tanto nos gusta, la felicidad.
  • No te condiciones, no necesitas a nadie ni tampoco la compañía de ninguna persona para sentirte querido, amarte y respetarte. Todo está en tu mente.
  • Hay una diferencia entre estar solo y querer estarlo, aunque nadie en el mundo se encuentra realmente solo a los ojos de Dios.
  • Puede que la compañía de otras personas evite la soledad o los recuerdos infelices. Sin embargo, en nuestro proceso hacia el enriquecimiento personal es necesario atravesar senderos dudosos.
  • Soledad no es reflexionar contigo mismo. Para conocerse uno, no existe mejor manera que caminando hacia la reflexión interior.
  • La soledad no tiene porque ser necesariamente sinónimo de tristeza. Depende de nuestra actitud, ser positivos y afrontar los retos de la vida desde el optimismo.


En conclusión con el artículo de hoy sobre si planteando equivocadamente la felicidad en compañía podemos llegar a sentir los abrazos de la soledad. La respuesta tendría 2 interpretaciones posibles:
  • La primera de las interpretaciones sería la posibilidad que planteó Henry Van Dyke “La felicidad es interior, no exterior, por lo tanto, no depende de lo que tenemos sino de lo que somos”. Para Van Dyke, la felicidad dependía de aquello que somos. Habrá personas para las que dependa de otros factores como por ejemplo sucede en el caso de la compañía de otras personas. En mi opinión, lo más razonable, sensato y sobre todo, saludable no solamente para nuestra autoestima sino también para la salud en general, es valorarnos tal y como somos. Sin dependencias de ningún tipo, tampoco de la compañía, ni de la interpretación equivocada de la realidad.
  • Por otro lado, destacaría otra cita de felicidad en este caso de Leon Tolstoi que dice así “Mi felicidad consiste en que sé apreciar lo que tengo y no deseo con exceso lo que no tengo”. Anteriormente, te hablaba acerca de las relaciones de pareja y de cómo estas relaciones nos influyen para que podamos tener felicidad. Realmente se trata de una respuesta de nuestro cerebro, a los miedos que tenemos como es el caso del miedo a la soledad. No obstante y fuera cual fuese tu situación personal, quiero que sepas que por muy mal que te encontrases ninguna persona se encuentra realmente sola a los ojos de Dios.


Antes de terminar con el artículo de hoy, me gustaría hacerte 2 preguntas:

  • ¿Te serviste de la soledad como herramienta para conseguir la felicidad en tu vida?
  • ¿Si tuvieras que elegir entre felicidad solo o en compañía de una pareja, qué preferirías?

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